El romero es una planta con numerosas propiedades, y un macerado en alcohol es una de las mejores maneras que tenemos de beneficiarnos de ellas, por supuesto en su uso externo :). Sus aplicaciones son múltiples, entre ellas están las siguientes:
- Combatir la celulitis dando masajes circulares sobre las zonas a tratar.
- Dar un masaje toníficante.
- Masajes calmantes en piernas y pies cansados.
- Masaje en las sienes para calmar las migrañas
- Relajar los músculos y calmar sus dolores.
- Combatir resfriados aplicandolo sobre el pecho.
- Combatir la celulitis, varices, mala circulación, dolor de piernas...
- Ayuda a cicatrizar las heridas
- Combate la caida del cabello
- Efecto antiinflamatorio y calmante para dolores articulares, reumáticos, torceduras, contusiones, golpes, molestias lumbares...
Receta:
- 1 Envase
- Romero fresco preferiblemente (también es válido el romero seco).
- Alcohol de 96º
Llenamos el envase con el romero y posteriormente rellenamos hasta cubrirlo con el alcohol. Lo dejamos macerar entre 15 y 40 días, lo colamos y lo guardamos alejado de la luz y el calor.
Podemos potenciar las propiedades de este alcohol añadiendo otras plantas o aceites esenciales de las mismas. Nosotras en este caso hemos utilizado lavanda, que es pariente lejana del romero y también es muy efectiva en eccemas, quemaduras, picaduras, heridas...etc. Juntos hacen una buena combinación, y además el aroma que dejan en la piel es muy agradable y fresco.
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